Habrá que nunca debe haber habido tantas cosas por haber

jueves, 31 de julio de 2008

La casa de Barbie no es rosa.

Me voy, cierro los ojos y me voy por un rato, de la manera mas sana, pero de la manera mas insolita y asquerosa, (en el buen sentido de la palabra).
Me refiero a que cierro los ojos y me imagino lo que no es, y lo que no existe, lo que quisa nunca pasaría o lo que más deseo.
Pero me doy cuenta que la vida no es perfecta, que la muñeca con la que jugaba se transforma en una amiga de carne y hueso que hoy esta, y mañana no. La casita en las cual vivían mis fantasías es la casa donde vivo todos los días cada una de mis melancolías, cada uno de mis miedos, cada uno de mis engaños y cada una de mis locuras enfermisas. El osito de peluche? jaja, ese es que me pregunta todas las noches si estoy haciendo las cosas bien y el que me permite abrasarlo para darme su contención. Mi auto rosa, el de las barbies es en el que me subo para irme lejos y evitar todo tipo de atropellamiento y problema. La barbie es la que yo quiero ser, pero se me resulta complicado, mi autoestima me da el pie a verme como la peor, sin valor.Mis muñequitos de plástico son mis enemigos, los que aborresco totalmente, pero no valen la pena.El bebote con quien jugaba a la mamá juega conmigo a ser su hija. Demuestro ser fuerte, pero sigo jugando a las muñecas.

Definitivamente, no me gusta el rosa.



Don't be afraid,don't be afraid of darkness anymoreand try to be strong,and try to beating all the shadows in this endless night.