Quiero que llegue el último minuto de vida, para saber quien estuvo conmigo hasta el final, mientras tanto vivo el día a día, vivo acostumbrándome a las decepciones, al egoísmo. A ser fuerte, y no desperdiciar un segundo con tristeza, con cosas sin solución, con recuerdos que quiero borrar, y con personas que no van a cambiar.
Conociendo, y perdiendo gente. Queriendo y odiando. Acostumbrarme a que CASI todo, es pasajero.
Luciana Tecles