Justamente, recientemente acabo de cagar (llámese también defecar, garcar, y diversos sinónimos)
Mientras realizaba el acto, pensaba muchas cosas que me motivaron a hacer esta nota.
Cagar, es una de las formas más espectaculares de descargarse y sacarte justamente, TODA LA MIERDA DE ENCIMA.
Cagar, te libera, te purifica y te deja limpio.
Lo bueno de esto es que es algo que cada uno hace diferente… es algo totalmente privado y personal.
Cagar, como todo, a veces duele y a veces es placentero.
Lo que me da bronca de este tema… es que todas, absolutamente todas las personas sanas del mundo lo hacen, lo hacen los animales también. Y no entiendo porque hay personas que no quieren hablar del tema, o cuando les nombras el tema ponen cara de “yo nunca cagué en mi vida” “tengo un tapón en el culo” “mi caca sale con olor a glade toque de limón”
NO, a nadie le sale un sorete con olor a rosas como también a nadie le sale un sorete con flores y arcoiris.
Señores, todos cagamos soretes, todos tenemos diarrea, NADIE TIENE UN TAPÓN EN EL CULO.
Lo que quiero agregar… como opinión personal es que cada baño es un mundo como también cada culo lo es.
Lo que si detesto son los pedos en público. Cada uno tiene su culo, su gas, pero no hace falta compartirlo es una falta de privacidad. A nadie le gusta el olor de otro.
Yo, a la hora de cagar me siento libre, me da placer, me da paz. Es un momento de reflexión absoluta…Un momento de silencio, un momento donde solo estas vos (y tu sorete), y como dije antes, un momento muy personal.
Gracias Dios, o el que sea que nos creo, por darnos este lindo placer de lo que es Cagar.
Luciana Tecles
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